Porque dejamos de lado la escritura tangible y tocamos las palabras de otra forma. Que hasta parece más real, pero hay mucho que dice poco.
Y pasan cosas mientras seguís con tu día (de noche) entre cuetes y milongas. Todo pasa quedando corto.
Ahora me digo que los mejores aguados pensamientos están guardados en una retina que mira poco para lo que vendrá, y poco dura en la memoria. Porque cuando apoyás el culo, ya es tarde. La letra se pegó el viaje y te dejó en el puerto (y se llevó tus valijas).
Aún así, y con todo esto que te cuento, está bueno mirar por la ventana de otra ciudad y descrubrir pequeñas Habanas en esquinas que son tan propias como extrañas. Observando lugares que te gustan y asquean a la vez, pero sin digerir del todo el paisaje que se te está ofreciendo - no tan - gratis.
El sol parece pegar más fuerte (aunque digan que se apaga) y se te curte la historia en otros tiempos, que por ahí no entendés pero escuchás y asimilás como se puede.
Aunque pienses en lo que está a un océano de distancia e intentes recuperar el contacto perdido (de antemano). Teniendo miedo de todo(s).
Quisieras estar en tu casa antes de dormir. Pero no largás el chivo y te despertás cagado de un calor que viajó con vos nada más que para joderte la vida, aunque sepas que el infierno sigue tal cual...
To be continued.
Ya está distinta la mano.
domingo
Publicado por Manolo's en 4:16