Semanas apositadas.

martes

Serán días duros, donde mejor olvidar. O eso me sugiere Coltrane.
Algunas actividades seguirán siendo mundanas. Y pareciera que todo pasa por el dilema de 'nérpola o no nérpola'.
A pesar de eso hay ciertos nombres propios que me gustan. Por lo menos mientras siga jugando con idealizar la belleza sustantiva a la par de la descriptiva.

Pero me desconcentra la mochez de un dedo que no termina de sanar (si tuviera ART, je!)... Manos, manos, manos. Una sobre la otra. Esperando. Jugando bicicleta de pulgares. Sin necesidad de que la música suene más fuerte.

Dedos locos.
Cuando cura uno, cae el otro.